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Hoy en día, obtener una hipoteca no es fácil, especialmente para los jóvenes, para quienes la única opción puede ser pedir a un familiar que actúe como avalista. Los propios bancos suelen promover esta solución, ya que les permite minimizar el riesgo de impago. Sin embargo, actuar como avalista de alguien no es una decisión que deba tomarse a la ligera. En caso de impago de las cuotas por parte del prestatario, el banco se dirigirá al avalista para que devuelva el importe adeudado. ¿Y qué pasa si el propio avalista necesita una hipoteca o un préstamo? Desde Prestamistas.net te explicamos exactamente qué supone ser avalista de un préstamo y qué riesgos conlleva.
Avalista de una hipoteca: ¿qué arriesgas realmente?
A menudo, oímos que la presencia de un avalista en un préstamo es una mera formalidad. Nada más equivocado: avalar económicamente a alguien es un compromiso serio, que además puede acarrear consecuencias desagradables. En caso de que el solicitante del préstamo no pague las cuotas, el avalista tendrá que intervenir y pagar de su propio bolsillo.
A pesar de la hipoteca sobre la vivienda, en caso de incumplimiento por parte del titular de la hipoteca, el banco tiene derecho a reclamar primero al avalista, a menudo sin siquiera tener que iniciar primero un procedimiento judicial contra el propio titular para recuperar lo que se le debe. Recuperar la deuda a través de la hipoteca puede, de hecho, llevar años: por eso es mucho más conveniente para el banco recurrir al avalista.
¿Qué pasa si el avalista se niega a pagar los plazos?
Dado que quien firma como avalista está adquiriendo un compromiso formal, si se niega a pagar las cuotas en lugar del titular de la hipoteca, se corre el riesgo de que ambos sean denunciados como morosos. Este episodio implicaría entonces enormes dificultades para acceder al crédito en el futuro.
¿Puede un avalista solicitar un préstamo?
En principio, sí, el avalista de una hipoteca también puede solicitar un préstamo. Obviamente, es necesario tener buenos ingresos y no haber tenido episodios anteriores de insolvencia. Sin embargo, muchos bancos tienden a considerar que el importe de la cuota mensual de la hipoteca de la que eres avalista es empleado en otra operación. Por lo tanto, para poder solicitar un préstamo a su vez, el avalista debe tener una posición económica muy sólida.
Si ya soy avalista, ¿puedo solicitar una hipoteca?
Como hemos visto, puede ocurrir que después de haber avalado a un familiar te encuentres en la situación de necesitar un préstamo o querer pedir una hipoteca tú mismo. Si este es el caso, debes saber que ser avalista no significa que no puedas solicitar un préstamo por tu cuenta. Esto significa que, si tus ingresos lo permiten, no deberías tener problemas para obtener un préstamo o una hipoteca aunque esté garantizando el préstamo de otra persona. Sin embargo, obviamente, la cuota mensual del préstamo del que se actúa como avalista afectará a la cuota de la hipoteca que puedas solicitar.
